Controla tus pensamientos.
La mente sigue funcionando continuamente. Empieza a trabajar en la infancia y sigue haciéndolo hasta la muerte. Setenta, ochenta años, constantemente trabajando; tantísimo trabajo que después ya no se puede esperar gran cosa de ella, porque está totalmente agotada. No le queda mucha energía, tiene fugas por todas partes.
Si pudieras desconectar …; en eso consiste la meditación; en desconectar la mente, es el arte de apagar la mente. Si puedes interrumpirla, acumulará energía.
Si durante unas pocas horas al día estás sin la mente, reunirás tanta energía que te mantendrá joven, fresco y creativo. Esa energía te permitirá ver la realidad, la belleza de la existencia, la alegría de la vida y la celebración.